El progresivo oscurecimiento del tisú de plata hacía aconsejable la sustitución del mismo por un nuevo soporte que viniera a devolver todo el esplendor de esta excepcional pieza del bordado sevillano.
Como puede verse en la fotografía, ya se está procediendo a fijar el bordado, una vez finalizadas las labores de limpieza y conservación del mismo, al nuevo tisú de plata.
Pronto podremos volver a disfrutar de todo el esplendor de esta magnifica obra que si Dios quiere, volverá a portar nuestra Santa Cruz en el mes de mayo.
Para sufragar la intervención, la hermandad puso en marcha un reparto de huchas entre hermanos y simpatizantes que se recogerán en el mes de mayo. Animamos desde aquí a los poseedores de las mismas en la esperanza, cada vez mas cierta de que el resultado de dicha iniciativa podrá ser disfrutado próximamente.
(Fotografia cedida por el Taller de Sucesores de Elena Caro)